De pastillas, suegras y ex novias

Llegue al trabajo media hora antes de mi horario y empecé la catarsis: tenía que conseguir alguien que me escuchara y Maria tuvo que escuchar. Después llego Agustina, y yo aproveche el oído fresquito para volver a recontar mi historia.
Al rato, ya pasadas las 8, llego Sabri. Nuevamente el desahogo de la escucha.

Sintiendo que tenía mucho para descargar pase a canalizar tanta...energía: decidí ponerme ordenar. Un roperito lleno de legajos que están para resolver desde hace miles de meses me recibieron alegremente. Ordene por años, por numero, en pilas. Todo prolijo, todo detallado, todo minucioso. Hice listas de cada una de las pilas y después de inventar un sistema de clarificación para que sea fácil cualquier búsqueda futura de legajos, me senté a descansar. Eran las 10.30 am y yo ya había clasificado 300 legajos, tomado 2 enormes tasas de café con leche y había hablado hasta cansarme.
Respire hondo.
Ya estaba.
Ahora, purificada por tanta canalización puedo pasar a relatarles la maravillosa anécdota que generó que hoy no quiera conocer a la madre de Sr. X.. o al menos no conocerla hasta dentro de mucho, mucho, mucho tiempo.

Después de pasar todo el fin de semana con el Sr . X llegó el domingo. Habíamos compartido horas de charla, colchón, estudio, comidas y hasta una visita a la farmacia. El sábado había almorzado en casa con mi familia y el grupo de amigos íntimos que son tan pero tan íntimos que se convirtieron en una extensión de mi familia. (la verdad, todo perfecto pero es super intenso esto de tanta presentación!) El Sr.X se la banco perfecto y todo salió bien. Y yo, cada vez con más vértigo por que esto se va volviendo serio y este candidato cada vez me gusta más.

Ok, estábamos en el domingo, ¿no? Yo a las 20hs tenía que estar en sani por que tenía reencuentro del retiro y encuentro de oración. Había un auto que salía de capital así que me podía ir con ellos pero el Sr X, que es un verdadero caballero, se ofreció a llevarme. Un poco tarde (porque inevitablemente nos cuesta activar y salir del cuarto) llegamos al garaje donde en teoría, esta el auto. No estaba.
Chan.
Lo tenía la mamá. Madre. Papel protagónico de este post.
El Sr. X explotó de bronca pero en realidad la pobre lo había pedido prestado así que el odio tenía que ser contra el mismo que se había olvidado de aclararle que en algún momento iba a necesitar el auto. No se acordó y estando a 20 minutos de mi reunión yo seguía en capital. El: con malhumor. Yo: intentando contener el propio mientras sentía que yo era la única con derecho a estar embroncada por que, al fin y al cabo, era yo la que llegaba tarde a mi encuentro. Evitando una catástrofe mayor, sonreí, respire y busque convencerme (y convencerlo a él) de que no era tan grave. De verdad, no era grave. Volvimos al departamento para iniciar una búsqueda que termino en fracaso: queríamos conseguir llaves de la madre para poder usar el auto de ella (ah sí, ella tiene auto propio...!). Ya siendo tardísimo termine subiendo a un taxi y pagando fortunas (¡fortunas!) para viajar a san Isidro.
y entonces: el mensaje.
"No entendes mi malhumor, cuando vos te enteres del detalle también te vas a poner de malhumor"

¿?
¿Yo, enojada con su santa madre? ¡Nunca! ¿A quien se le ocurre? ¿En que mundo podría darse?
Yo, que todavía no la conozco, estoy ansiosa y desesperada por lograr que ella me quiera. Y, seamos sinceras, que me quiera mucho. Muchísimo. Casi casi que, si pudiera elegir, yo voto por que me adore.

Ok, no va a pasar. ¡Nunca! No hay forma de lograrlo. Madre no me va a querer nunca. Paso a explicar:

El cuento termina (y voy sintetizando por que si no esto es eterno)con un encuentro tremendo.
Resulta que el Sr. X, en pleno enojo llamó a Madre para decirle que manejara rapidísimo por que él necesitaba el auto y que por eso, en vez de llevar el auto al garaje, se lo dejara en su casa. Ahora bien, cuando yo partí en el taxi el muchacho se olvido de cambiar la consiga y Madre (después del reto!) cumplió prolija mente el pedido. Tan prolijamente que apareció en la casa de mi candidato con una sorpresa. En el auto estaba el perro del Sr. X...y la ex.
Así es,señoras y señores, de pronto estaban Sr. X, su Madre, la ex novia y el perro.
Perro maldito (así es, lo odiamos) que supo ser de la pareja y que con la separación sufrió la división de tenencias. Quedo a cargo de la ex (que, ya que estamos, también la odiamos) pero, como mi querido hombre lo quiere mucho de vez en cuando arreglan para que lo saque a pasear. Leyeron bien: comparten la tenencia del perro. Estas cosas pasan en este mundo, aunque pueda parecer insólito. Parecer no...aunque ¡¡es insólito!
Habían salido a pasear al club la santísima trinidad Madre-ex nuera-perro y todos pasaron a buscarlo por la casa.
Por un segundo dejen de leer. Cierren los ojos y visualicen la situación. Ahora agreguen un ingrediente más: ¡¡¿¿¿se imaginan si yo no me iba en taxi y me quedaba esperando a que llegue el auto?!??! Expliquen que sale si uno sigue una receta en donde hay semejante menjunje de componentes....!!!! Trágico. Hubiera sido trágico. Lo pienso y me hagarra un ataque. Ojo: ataque de risa nerviosa, dolor de panza y un poco de ganas de gritar.
en fin, eso no paso. ¿Que paso entonces?
¡¿Que hizo él?! Se subió al auto.
Voy otra vez y voy más lento: se-su-bio-al-au-to.
¿había necesidad?
Claaaaaaaaaro. ¡No vaya a ser cosa que la madre siguiera manejando cuatro cuadras más! ¿cómo se me ocurre?¡Que cosa más ridícula!. El buen hijo acompaña al estacionamiento como debe ser. Aunque el plan era comer con Madre, que vive a 1 cuadra de su casa, tenía mucho más sentido subirse al auto y partir en peregrinación al estacionamiento.
Y los cuatro fueron al garaje. Y dejaron el auto. Y se bajaron. Y caminaron las 4 cuadras otra vez. Y llegaron a lo de Madre. Y Madre la invitó a la ex a subir y quedarse a comer. Demos gracias por que en algún rincón de la cabeza de esta ex existe la cordura y ella rechazó amablemente la invitación a comer...pero subió igual!!! Y asi nomas quedaron los 4 en el departamento de Madre charlando y mirando videitos por You Tube.

¡¡¡¡¡¡¡Levante la mano quien crea que NO DA esta situación!!!!!!!!!!
¿Saben lo que significa ese encuentro? Traduzco: Que Madre aparezca por lo de Sr. X con la ex es sinónimo de:
a. No tiene idea de que existo, por lo cual el mundo puede entender que mi candidato no considera que yo sea suficiente candidata como para avisarle al mundo que comparte sus horas conmigo.
b. Tiene idea y no le importa: es cómplice de un plan maligno para lograr que Sr. X a partir del encuentro casual vuelva a sentir todo lo que alguna vez sintió por la ex, se enamore otra vez y me abandone de un día para el otro.

Sinceramente, no se que es peor lo que me convierte en una imagen triste. Tristísimo lo mío.
y lo màs triste de todo es que probablemente sea sinonimo de una respuesta "c" que son a+b: no sabe que existo y quiere que la ex vuelva a la vida de su hijo.

El cuento sigue con la comida (pollo, por si a alguno le interesa) que compartió mi candidato con Madre y la posterior despedida. No tengo detalles de como fue por que los hombres son bastante malos para recordar palabra por palabra como a nosotras nos hace bien escuchar. Me tomo licencia y paso a inventar el dialogo que seguramente ocurrió entre estos: - "Ah, antes de que te vayas te tengo que dar algo que encontré en el auto"-. Medio nerviosa empieza a explicar: -"se me cayó un tee de golf y cuando me agache a buscarlo encontré esto abajo del asiento y bue..nose, te lo doy. No sabía si dejarlo ahí o no..."-
y en ese solemne acto hace entrega de una cajita blanca.
Sr. X, que es bastante hombre para algunas cosas, recibe la cajita sin entender. Y simplemente sin entender porque Madre estaba reflejando tanto nerviosismo, decide abrir la cajita. y ¿Que es lo que encuentra? el blister de pastillas anticonceptivas.
Así es.
MIS pastillas.
Mis pastillas que significan que nosotros hacemos cosas que seguro que ella cree que son pecado.
Sr. X, relajado como es, empezó a reírse a carcajadas. Por suerte, ella también.
-"Creí que te iba a dar vergüenza, no sabía que hacer"- le dijo, tratando de explicar el porque de sus nervios.
-"¿Nervioso? Cero! ¡me parece muy gracioso!"- y mientras, seguía riendose.
-"ay que bueno, mejor. No le cuentes a la chica que las encontre yo, pobre se va a querer morir"-Agrega, la muy atenta
-"Pero obvio que le voy a decir, es muy gracioso esto"- contesta ridículamente él.
y así, creyendo que era muy gracioso, me lo contó a mi vía mensajito de texto.

"Mi mamá me acaba de dar tus pastillas, las encontró en el auto"

Ok. Estoy por morir de un ataque de vergüenza masivo.
Soy la chica. Eso y nada más que eso. La chica.
y sí, me quiero morir. Tenes razón Madre, ¡gracias por la comprensión!

Alguien por favor que me explique ¿¿¡cómo hago ahora para lograr que me quiera la madre de mi saliente que sabe que soy pecadora, que no tengo un perro y, básicamente lo central: que no soy la ex con la que ella va tan contenta a pasar el día al club??!

¿Ideas?