EL DÍA ANTES DE CUMPLIR 24 AÑOS, ESTANDO SOLTERA Y DESEMPLEADA, DECIDÍ CAMBIAR MI TRADICIONAL SISTEMA DE CATARSIS. YA NO ERA SUFICIENTE LA PSICÓLOGA Y LOS FECAS CON AMIGAS. HABÍA QUE DAR UN PASO MÁS Y EL BLOG SE CONVIRTIÓ EN UN TRIUNFO: DESPUÉS DE MESES (AÑOS?!) DE ESTAR TENTADA, ME ANIMÉ A ENTRAR AL MUNDO. FUE ANIMARME A COMPARTIRLES A TODOS, A PARTIR DE ESTA VENTANA, UN POQUITO DE LA LOCURA DE MI SER. PORQUE, NO VAMOS A NEGARLO, SOY UNA LOCA TOTAL. LOCA LINDA IGUAL ¿EH?, DE LAS QUE DAN GANAS DE QUERER. PERO INDUDABLEMENTE NEURÓTICA.
EL ESPANTO DE SEGUIR CUMPLIENDO AÑOS SE POTENCIA POR LA FALTA DE PAREJA Y EL DESAFÍO DE CONVERTIRME EN UNA VERDADERA MUJER MODERNA: ESTUDIAR, PRODUCIR, TRABAJAR, SALIR, SATISFACER LA MIRADA DEL MUNDO, BRILLAR, DISFRUTAR, ADELGAZAR Y OTROS TANTOS MILES DE VERBOS QUE SE ACUMULAN EN LA LISTITA DE "DEBER SER" GUARDADA EN LA CARTERA.
HOY DECIDO LIBERAR UN POCO DEL CAOS DE MI SER A PARTIR DE LAS PALABRAS PARA VER SI, QUIZÁS ASÍ, DECRECEN LOS NIVELES DE HISTÉRIA Y NEURÓSIS

... Y SI NO FUNCIONA, AL MENOS NOS REÍMOS UN RATO!!!!!

domingo, 19 de agosto de 2012

Partir rumbo a Austin, Texas.

Hay muchos que ya deben haber leído este relato vía mail. Pero quién todavía no lo hizo esta invitado a sentarse cómodo, abrir una cervecita fría y relajarse. Lo que estan a punto de leer puede ser muy estresante y no tengo dudas de que puede agotar al lector.

* Primera prueba: tener todo listo y lograr salir a las 17hs
El lunes fue un día...díficil. Por suerte mi mamá estaba al pie del cañon y se morfo todas mis locuras. Me despedí de compañerito de trabajo (el nuevo candidato-no-novio-todavia) a las 7:30 de la mañana desde el anden de acasusso: cómo si fuera una película más, el se subió al tren para ir a trabajar y yo me quede llorando en la estación. El drama en su expresión máxima... Yo había dormido dentro de todo bien porque el domingo a la noche caí rendida del agotamiento pero igual me desperte cansada. Por suerte llegué a mi casa post-despedida-dramática y después de un ratito terminando de ordenar me pude volver a dormir. Llegó mama cerca de las 10 lista para hacer de heroína y ayudarme todo el dia (no se que hubiera hecho sin mama!!) y ahi empezo el rally:

1. Ordenar toooodo el depto: cargar la valija, la ropa que faltaba planchar y guardar en la valija; la ropa/sabanas/toallas que faltaban lavar, planchar y guardar en la valija; las cajas con cosas mías; las bolsas con cosas de mama; las botellas.. en fin.. de todo para subir al auto. Mamá preguntó: -"tenes todos los papeles...? pasaje, pasaporte, tarjeta de crédito...?"- a lo que respondí que sí y le mostré mi carpetita negra de viaje. La carpetita que me habían dado en el congreso de Santa Fe el año pasado. Una carpetita super prolija que tenía preparada desde hace semanas y que lo último que había agregado era los dolares que yo había sacado la semana pasada. Todo super prolijo.
2. Pasar por la joyería a ver si cambiaba un regalo por un reloj. No sucedió porque la joyeria no vendia relojes.
3. Volver al depto a buscar el mate: asi es, mama volvió a subir hasta bsucar el mate mientras yo la esperaba en el auto.
4. Ir a Movistar a cambiar el plan para el tiempo del viaje
5. 11:30hs: Mama se fue a llevar las cosas al laverap - yo me quede en san isidro y fui al Kodak a imprimir fotos de mi flia para llevarme al viaje.
6. Ir a tribunales a buscar una bandeja que me había dejado y era para mis inquilinos. En realidad la bandeja me doy cuenta que no importaba tanto como volver a verlo una vez más a mi compañerito de trabajo... nos encontramos en un 5to piso para yo darle un ultimo regalito y el darme la bandeja. Prometí no llorar. Bue... no resultó. Él se olvidó la bandeja arriba y yo no pude contener las lagrimas otra vez. Fue un último beso de despedida muy a las apuradas...
7. Pasar por la farmacia. 
8. 13.30hs; Me buscó mi tía para ir a lo de mamá a almorzar y terminar la valija. Almuerzo con mi hermano, su novia, mi tía y mi mamá.
9. 14.30hs: terminar la valija!!! terminar de guardar tooodoooo!!!
10. 16.00hs: turno con la depiladora. a la media hora me buscó mamá y fuimos a su casa. Ahí ya estaban todos listos para salir.

17hs: salimos rumbo a Ezeiza. Yo: agotada. Mamá supongo que también!!!!
--> Prueba superada.

*Segunda prueba: el pasaporte
Hasta ahí, más allá de mi llanto constante, a lo largo del día iba todo bien. Había logrado terminar todo en tiempo y forma lo cual era sumamente admirable teniendo en cuenta mi inestabilidad emocional de los últimos días (ja). Yo lagrimeaba pero era un buen momento. La llamamos a mi hermana menor desde el auto, ibamos charlando, jorobando.
Papá insistió con mis papeles por 2da vez en el día: tenes todo? el pasaporte vigente, la visa...? La tarjeta de crédito? A lo que respondí, otra vez usando el mismo tono de "oooobvio que siiii papaaaaaa que incha que soosssss" que si, que estaba casi segura que la tarjeta de credito estaba pero que de ultima nos enterabamos en ezeiza si me la había olvidado.
"-no esperes hasta ezeiza. Controla todo AHORA".-dijo mi papá.

Ok. Hago lo que diga Ud, papuchuchuchu.
Abro la carpetita y estaba todo ahí super prolijo como desde hace días. El pasaporte, la tarjeta de credito, la tarjeta de estudiante de la UBA, la tarjeta de OSDE, la plata, el papel de los pasajes, la carta de la UBA con al resolucion... etc. etc. 
Como quien quiere la cosa, abro el pasaporte.
Ahí estaba el momento dramático. 
El momento en que uno dice "estas cosas a mi NO me pasan y le pasan siempre a otro". 
El momento en donde te sentis la persona más idiota del universo. 
El momento en donde queres desaparecer de la tierra.
....EL PASAPORTE QUE YO TENIA ERA EL VIEJO. EL VENCIDO. EL QUE NO TENÍA NINGUNA VISA DE NADA. Lo había guardado mal.

Así como leen. Yo no podía viajar, señoras y señores.
Ataque de pánico ahí mismo.
Ni siquiera de lagrimas: de shock. De enojo. De estress. 

No tenía idea donde podía estar. Empece a divagar: existió este pasaporte? sí, existió. Lo fui a buscar a HLD cuando me lo mandó la embajada de usa? Sí, lo busque. Lo saque de casa? Sí en un momento estuvo en lo de mamá xq mis hermanos lo habían escaneado. 
-"Debe haber quedado ahi" pense. Lo que era totalmente ridiculo porque en realidad ellos me habían escaneado el pasaporte para que yo pudiera mandar los papeles necesarios para la visa, que después hice y después busque.. pero bueno, en ese momento se mezclaron los tiempos, la cronologia se me torció y era la única opción que se me ocurría.
Eran las 17:45hs. Dimos la vuelta rumbo a san isidro y llamamos a mi hermano para que empezaran a buscar entre las cosas de mamá y papá a ver si había quedado ahi. Mi hermano, mi cuñada y la chica que trabaja en casa dieron vuelta la casa. No aparecía. 
Mamá estaba al grito de "Sophie iluminanos, abrinos los ojos para que podamos ver. Sophie ayudanos a encontrar este pasaporte. Tiene que aparecer". 
Mi prima, en voz baja me tranquilizaba y me decía que tenía que aparecer. Estaba segura de que iba a aparecer.
Papá, en silencio, manejaba lo más rápido que podía pero el trafico estaba imposible pro al general paz.
Yo... lloraba. Puteaba. Gruñia: "este viaje es una mierda. Listo, no viajo. no viajo una mierda. Ya esta, no voy".
Estabamos todos esperando que nos avisaran que había aparecido. Pero no. Mi hermano no llamaba.
Empezamos a desesperarnos. Todos. 
Se nos ocurrió que quizás había quedado en mi depto.. era obvio que no porque con mamá a las 11.30 am habíamos dejado todo totalmente limpio y vacio, listo para los inquilinos. Pero en esos momentos uno busca hasta en los lugares más insólitos. De hecho, gonzalo hasta abrió la heladera y mi papá reviso cada uno de los bolsillos de sus trajes pensando que quizás podía estar ahí. Mi hermano, mi cuñada y yo fuimos en auto hasta mi departamento mientras mis papas, mi prima, Ada (la chica de casa) y mi hermanita revisaban toda la casa de mis viejos. Había que abrir todas las cajas en donde mis cosas habían quedado embaladas. Era una misión imposible. Empecé a pedirle a los que rezaban que le pidieran encomendaran la búsqueda a algún santo....
Eran las 18:00hs y nada. 18:15 y nada. 18:30 y nada.
Volvimos de mi departamento hasta lo de mis papás y cuando estamos entrando el auto, en la puerta suena el teléfono. Llegamos y la veo a mi prima saltando y a mamá corriendo desde la entrada junto con mi hermana y papá: el pasaporte estaba.
Nos subimos al auto. Salimos para Ezeiza otra vez. Segun mamá, Sophita mi prima desde el cielo había ayudado: había encontrado el pasarporte y la había usado a mechita de instrumento. Segun Mechita ella era una genia que había podido identificar que la carpetita negra super prolija de mi congreso de santa fe tenia el mismo logo que un bolsito gris en donde apareció el pasaporte. Segun Clari todos tenian razón.
Yo estaba tan histérica que mamá se subió atrás conmigo para ir calmándome.
Me abrazo y… yo rompí en llanto. Como una beba. Llanto desconsolado, de desahogo y de liberación pero a la vez de cansancio. Estaba liberando toooooda la tensión de esa última hora.
Un horror.
Y mientras yo lloraba, mi papá trataba de hacer magia para llegar a Ezeiza antes de que terminara el horario para el check in.
Por suerte mis amigas del alma ya estaban en Ezeiza, listas para despedirme, y se habían ocupado de avisar a la gente de United que yo iba en camino. Y por suerte también había relativamente poco tráfico y pudimos ir ligero hasta el aeropuerto.
A las 7:45 estaba bajándome del auto, con las valijas y los bolsos y los mil bártulos.
--> Prueba superada!!!

*Tercer prueba: despachar las valijas y subir al avión.
Una vez que llegué al mostrador tocaba el siguiente desafío: lograr despachar las valijas sin tener que pagar sobrepeso… bue, resulta que no todo era tan fácil. Ahí estaba yo, muerta de nervios, con los ojos hinchados de tanto llorar, con el pelo transpirado del estrés y los mil bartulos.
La subo a la balanza.. y daba 29kg en vez de los 23 que tenía que pesar. Lo mire al empleado de United con ojos de pollito mojado. Le explique que iba a abrir la valija y pasar cosas al bolso de mano. Con la ayuda de mi hermana y mi prima logre mágicamente sacar 4kg y pasarlos al bolso azul….la balanza daba 25kg. El tipo dio el ok y la valija pasó.
Una vez despachada nos fuimos a tomar algo. Todos necesitábamos decantar el estrés que habíamos pasado. Cervecita y coca cola para todo el mundo. 20 minutos después llegó el momento de la despedida. Abrazos, un par de lagrimas y pasar a migraciones.
Todo salió perfecto.
A las 21:30 estaba arriba del avión, despegando.
--> Prueba superada!!!

*Cuarta prueba:  Hacer la conexión con Austin.
Antes de las 6 me desperté con el desayuno. Había podido dormir toda la noche aunque tenía una contractura tremenda.  A las 6:30am estábamos aterrizando en Houston. Yo asumí que la compañía tenía los horarios programados teniendo en cuenta los tiempos que lleva entrar a EEUU y que por eso yo no iba a tener problemas.
Error.

Resulta que no.
Tardé años en bajarme del avión no-se-por-que.
6.40hs. empiezo la fila de migraciones. Migraciones tardó siglos.
6.55hs: Cuando terminé ahí hubo que caminar hasta la punta del aeropuerto para buscar la valija.
7.05hs: Después, hacer una nueva fila eterna para pasar Aduana y despachar la valija para que la subieran a mi avión. Yo estaba a esta altura, totalmente estresada y transpirada otra vez más.
7.10: Logré dejarla valija y de ahí caminar para el otro lado, hasta otra punta, para hacer el control de seguridad.
7. 15hs: Una vez que pasé el control me dicen que busque en la pantalla la “gate” para subir a mi avión. Yo estaba en la terminal A. Si hubiera volado en esa terminal llegaba… pero no. Resulta que tenía que ir a la terminal B y para eso había que subir 2 escaleras, atravesar un pasillo y tomar un tren.
Me bajé del tren y eran las 7:19. Tenía 9 minutos para llegar a la puerta exacta. Ahora dependía de cuán lejos estaba la Gate B-22.
Bueno… resulta que muy, muy lejos. A esta altura yo ya me había dado cuenta que el aeropuerto de Houston es gigantesco.
La imagen era la de una flaquita corriendo toda transpirada cargando una cantidad de bartulos que acumulados eran casi más grandes que ella. Ridículo. Y sobre todo, ridículo porque mi corrida era torpe y lenta por culpa de todo ese peso que mis pobres hombros estaban intentando soportar: cartera a punto de explotar, que a su vez tenía atada una camisa azul; un maletín para transportar la computadora y una carpeta, un par de libros, un par de cuadernos, un par de boludeces más , que a su vez tenía enganchado el tapado beige de invierno y además  el bolso de mano que gigantesco de más de 6kgs, ya que al momento de despachar la valija ya dije que hubo que sacar todos los kg de más que tenía…los 4kg fueron a parar al bolso que en ese momento yo cargaba mientras intentaba correr.
En fin, ahí estaba yo, corriendo mientras cada 3 pasos miraba el celular, como para confirmar que era una misión imposible llegar.  Yo iba siguiendo los cartelitos que indicaban las gates. Daba una vuelta y aparecía un pasillo todavía más largo. Era desesperante. Mi estado físico es terrible y en esos momentos queda en evidencia. No me daba el aire. (Obvio que en esos momentos una piensa que apenas empiece el semestre va a empezar gimnasio… después queda solo en la idea).
7:28 llegué a la gate 22.
Estaba cerrada. Era muy tarde. Una escena de película otra vez (a esta altura ya el temita cine me estaba agotando. La despedida en el andén te la tomo, la adrenalina del pasaporte y la llegada a Ezeiza ya me habían agotado pero bue, era un buen cuento pero la 3er escena dramática en 2 días ya me superaba)
Apareció una empleada de United. La pobre no tenía idea lo que le estaba por tocar. Empecé a rogarle que me abriera la puerta, que yo tenía que subirme sí o sí, que mis valijas estaban ahí que bla bla bla. Obviamente yo.. lloraba. Desconsolada.
Al pedo. No conseguí nada. La valija no había llegado al avión y yo tampoco.
La señora me tranquilizó y me aclaró que tanto la valija como yo íbamos en el siguiente vuelo y que el avión salía a las 10. Tanía tiempo de ir a tomarme un café y pasar por el baño. Al final, resultó un buen momento. A las 9 subí a mi avión y a las 9:40am ya estaba en Austin.
--> Prueba superada!!!

Quinta prueba: llegar a mi departamento “the Quarters”
En teoría, si yo lograba subirme a mi conexión hubiera llegado a Austin a las 8:22am. En ese momento estaba esperándome Chris, un chico que es parte de una organización que se llama Planet Longhorn que se ocupa de recibir a los estudiantes extranjeros de Austin.
Resulta que yo nunca llegue. Y el buen muchacho se fue.
Así que el nuevo desafío era lograr llegar a mi departamento. Obviamente que a esta altura del partido lo lógico era pagar un taxi y dejarme de joder peeeero no. Di un par de vueltas buscando información e intentando encontrar algo que no tenía muy en claro que era. Hasta que la vi…!
Era una chica joven, claramente una estudiante, que tenía un cartel de “welcome muhhamad” o algo así.  Supuse que era de la organización Planet Longhorn y me tire el lance. Me acerque y le pregunte cómo hacía yo para llegar a UT (mi universidad). Le conté lo que me había pasado y ella no solo conocía la organización sino que además resultó ser la vicepresidenta!!! Asi que se ofreció a llevarme sin ningún problema. Hubo que esperar como una hora: primero esperar al chico que ella había ido a buscar y después esperar a las valijas del muchacho que nunca llegaron. Salimos del aeropuerto y recién cuando el calor me aplastó tomé completa conciencia de que ya no estaba en mi país. Hace un calor agobiante… es terrible.
La chica me dejó en la puerta del departamento. Me mira y me pregunta por la llave.
No la tengo, obviamente. 
Resulta que iba a estar una persona esperándome en la puerta conforme los horarios que había anunciado yo via mail. Yo no llegue y ahora la persona (Kristen) no estaba.
Nueva imagen para el recuerdo: Claricienta con todas sus valijas, vestida con calzas y borcegos con 30 grados de calor sola en la puerta de un edificio en el medio del West Campus de Austin, Texas.
Me quería morir muerta.
La odisea de llegar a mi departamento no terminaba más....
12 del mediodía. Un sol que rajaba la tierra. 
Yo, vestida de invierno y con mil bártulos estaba ahí paradita con cara de “no-doy-más”.
Cassia, la chica que me había llevado del aeropuerto se había ido. Tenía que buscar a otros extranjeros. Me había dejado con una pena terrible y un poco de culpa pero… me había dejado al fin y al cabo.
Resulta que yo estaba un estado de inestabilidad tal que por momentos me invadía una desesperación capaz de hacerme creer que me iba a morir en la puerta del edificio y dos minutos después yo dejaba de llorar, respiraba hondo y juraba que todo iba a salir bien. Tenía que lograr contactar a Kristen que era la chica que se había ocupado de mi alquiler. Para abrir la puerta del edificio había que pasar una tarjeta (es como abrir un cajero automático de noche) y una vez abierta la puerta lo único que había en el hall era un ascensor.
No tenía batería en mi teléfono. Tenía batería en mi computadora pero no había wi-fi como para mandarle un mail a Kristen. De pronto entró un chico al edificio y me dejó pasar. Por lo menos estaba adentro, esperando con aire acondicionado. No tenía idea sobre cuál era mi cuarto pero era mejor esperar adentro que en la vereda. Le explique que era una estudiante de intercambio y él me dijo que era Italiano y que también era un recién llegado. Había contratado el departamento con la misma organización que yo. Le pregunte si tenía el numero de Kristen y me dijo que no y que tampoco tenía un teléfono celular americano peeeeeero que iba a subir a averiguar porque sus roommates si lo tenían.
Se fue.
Y yo quedé sentadita con todas mis valijas. El italiano no volvía… no aparecía…
Me impaciente. Descubrí que mi computadora podía captar la señal de wi fi del negocio de camas solares que estaba al lado del edificio. Entonces apareció un dilema: salir del edificio, al sol, a intentar que al lado me den la contraseña para poder mandarle un mail a Kristen diciéndole “hola que tal estoy en la puerta” con el riesgo de quedar del lado de afuera…o quedarme esperando que volviera el italiano con ayuda.
Ganó la impaciencia.
Abrí la puerta y medio haciendo malabares logré sacar todos mis bolsos y caminar hasta el negocio… solo para darme cuenta que no había nadie. Estaba vacío. Un bajón terrible.

Y cuando todo parecía sin solución… aparece el italiano.

Y en ese momento todo fue maravilloso. A partir de ahí todo fue genial.
Había llegado el momento de disfrutar.

El italiano había bajado con un español esplendido que se acercó a auxiliarme con mis valijas. Me dijo que tenía el número de Kristen y que si yo era argentina probablemente iba a ser la compañera de departamento de “Aracelí”. Justo apareció una chica yankee que nos saludo y que parece q también estaba instalada en lo de Aracelí.
Me abrieron la puerta y entramos las valijas. Subimos al 2do piso y mientras, el español llamó a Kristen y quedaron en que nos encontrábamos todos en el 511, el departamento de Araceli.
Mi departamento.
Paso a explicar la cadena de coincidencias. Yo decidí alquilar este departamento en el edificio “The Cameron House” porque el argentino que viajaba becado por la UBA igual que yo, había alquilado ahí. El ya estaba en Austin desde la semana pasada y estaba instalado en su departamento 212. Resulta que el vive con Juan, el español. Y con ellos vive el Italiano en cuestión (Miquele). Juan es de valencia y vino becado a estudiar arquitectura junto con Araceli. Así que ellos estaban todos pendientes de cuando llegaba la argentina que iba a estudiar derecho con el argentino y que iba a vivir con Araceli.
Y ahí estaba yo, llorisqueando nuevamente, pero esta vez, de desahogo. Finalmente estaba en el 511, siendo capaz de dejar las cosas en mi cuarto y tomar un vaso de agua fría.
Había llegado sana y salva. Ya estaba en Austin.
Kirsten llegó al ratito y me dio mi juego de llaves. Araceli me prestó su computadora para escribirle a mis papás y a mi compañerito de trabajo contando que estaba vivita y coleando.

Siendo las 12:30 yo ya estaba instalada.

A partir de ahí todo fue bajar mil cambios, intentar des-acelerarme, y de a poco ir encontrando mi lugar.

La mejor noticia de todas es el super grupo que armamos. El cuarteto español-argentino ya se consolidó como grupo. Ara y Juan son muy pegote y la verdad es que mi compañero UBA resultó super piola. Hace cuatro años que se instala todos los veranos a hacer los viajes de “work & travel” asi que tiene un super nivel del inglés y la tiene clarísima con los yankees. Estoy feliz con mi grupete.
=)
Ese mediodía Ara cocinó fideos y bajamos con nuestros platos y vasos al departamento de los chicos para comer todos juntos. De ahí nos preparamos para ir a una charla de introducción de la facultad que era obligatoria para los estudiantes extranjeros. Un plomo biónico. De ahí nos fuimos a una pileta que tiene el conjunto de departamentos.  Nuestro edificio no tiene pileta propia pero si entramos en otro de los complejos no hay drama en que usemos la pileta. El sol era agobiante.

Nos quedamos un rato ahí y finalmente volví agotada al departamento.

Tipo 18:30 me permití salir a caminar sola las cuadras de mi barrio. Estoy en West Campus y  eso significa estar a 3 cuadras del campus. La calle que bordea la universidad, la Guadalupe St., tiene un montón de locales comerciales así que camine un par de cuadras buscando un negocio de internet y computadoras porque yo necesitaba cable para poder conectar mi compu. Después fui a una especie de kiosco gigante/mercadito para comprar algo para cenar a la noche. Me permití gastar en cosas ricas: mi compra consistió en patitas de pollo, coca cola, 2 potes de helado Häagen-Dazs y un mega paquete de galletitas chips Ahoy.
Una gloria.
A las doce de la noche me fui a dormir.

Definitivamente mi llegada a Austin ya era una verdadera prueba superada!

(y si llegaron con la lectura hasta aca solo me queda decir... prueba superada queridos lectores!)

6 semanas

En mi vida, el mes de julio es importante.
Si me pongo a pensar supongo que puedo encontrar razones para justificar la importancia del mes nro siete del año (como, por ejemplo que desde que tengo 3 años, julio significa vacaciones o que los 20 de esa mes se celebra el día del amigo)  pero básicamente, julio es y será un mes central en la vida de Claricienta porque  desde hace 26 años julio significa mi cumpleaños.
Ahora, más alla de que a esta altura entiendo que es un mes intenso, esta vez fue casi excesivo.
Aun cuando estaba mentalizada, no creo haber medido la trascendencia que iba a tener en mi vida el periodo de 6 semanas que comprenden la última semana de junio 2012 hasta la primer semana de agosto 2012.

En esas 6 semanas yo me recibí de abogada. Rendí mi última materia (Derecho Procesal Laboral) en la facultad de derecho y recibí la nota junto con toda mi familia y amigos metidos en la clase. Hubo aplausos y un discurso que anunciaba un 9 con la introducción de "y Clarita, que la rompió"... por parte del profesor. Después llegó el ataque en la puerta de la facultad, que en mi caso no se trató de huevasos y comida sino que más bien fueron productos de limpieza y pintura. Un regio enchastre para coronar 7 años y medio de carrera universitaria. Muy fuerte.

En julio terminé de cursar el práctico. Hubo brindis, discurso, pizzas y hasta fiesta de egresados. Nos volamos la peluca, y fue genial.

En julio mi compañera de departamento me avisó que ya no quería seguir viviendo conmigo y que iba a buscar un departamento para ella sola. Lo que implicó salir a pedir inquilinos y ofrecer mi departamento para alquilarlo hasta diciembre. Parecía una misión imposible, pero lo logré.

Las dos últimas semanas de julio fueron vacaciones. Es la feria judicial. Eso significó que mi compañerito de trabajo y yo nos pasamos pegados los 14 días. Ya esta clarisimo: somos pareja. No novios, pero sí pareja. Muy fuerte. De verdad, muy muy muy fuerte. Yo aproveche esos días para hacerme masajes diarios, hacerme una limpieza facial, para arreglar y embalar todo lo que tenía que sacar de mi departamento para dejarlo limpio para los inquilinos...en fin, dos semanas de muuucho ocio y un poco de tramites.

El viernes 27/07 cumplí 26 años. Me volví adulta. Es así y no hay vuelta que darle. Ya estoy recibida, en pareja, con departamento propio y una beca para el exterior. Es tremendamente impactante pero es así. Soy grande.

y con la primer semana de agosto llegaron las despedidas. Me voy a vivir a EEUU. Voy como estudiante de intercambio. Son solo un par de meses pero me angustia de sobremanera tener que partir a un país en donde se habla otro idioma. Me da pánico irme sola. Me abruma saber que me quedé sin trabajo y que cuando vuelvo, voy a ser desempleada. Me da una pena tremenda dejar a mi pareja (chan!!) y sobre todo.. me da fiaca el esfuerzo que va a implicar. Fue una semana de mucho llanto, muchas corridas, mucha despedida entre valijas a medio terminar. Embalar mis libros, comprar un sillón, lavar toooooda mi ropa, llorar mucho (pero mucho) y escuchar muchas palabras de animo.

6 semanas de transición profunda.
Puede sonar un clisché pero no tengo dudas que este mes y medio fue una especie de trabajo de parto...hacia una nueva etapa.
Veremos que nos depara la vida!