Terrible desilusión....

El sábado estaba decidida a no seguir con el mismo drama de cada fin de semana: no hay nada para hacer y aunque terminamos en alguna fiesta, claramente no estamos en una buena racha de programas divertidos. A mi me faltan pilas pero sobre todo amigas solteras. Bah, amigas solteras salientes, porque entre que somos pocas las sin-novio algunas insolentes se dan el tupé de preferir una comida con amigas y un juego de mesa en la noche de viernes en vez de ponerse los tacos altos.

¡Así no funciona, queridas mias!

Había que ganarle al aburrimiento.

Invité a las chicas a comer a casa y después de que las novieras abandonaran el equipo quedó conformado por el elenco estable de las ultimas semanas: 3 soldados imbatibles.

Preboliche + fiesta en el hipódromo. Cierra perfecto.

Lo resumo: un toque de alcohol en exceso (Un toque...lo suficiente para estar divertida, desinhibida pero nada de papelones. Punto perfecto.) y muchas ganas de pasarla bien.

De repente lo ví.

Estaba ese pibe al que tengo fichado hace mucho, mucho, mucho tiempo. Tanto como decir dos años. Al principio solo conocía su historia: es un viajante viajero. Lo contacte por facebook y me paso un par de datos de Colombia. Después conocí su blog: me convertir en una lectora discontinua pero lectora al fin. Después lo escuche dar una charla y ahí me dieron muchas ganas de que este tipo me invitara a salir.

Y nada, quedo en las ganas nomás.

Pero era sabado, yo estaba entonada y de pronto este viajero viajante estaba ahí. Lo saludé. El tipo no tenía idea como corno me llamaba, pequeño detalle. Nada importante. Lo importantes es que, por que tenemos amigos en común, terminamos bailando muy cerca. Y sé dió cuenta que yo lo estaba mirando.

Y me miró también.

Y charlamos.

Y bailamos. O más bien... intentamos bailar porque cada vez mi incapacidad motriz es más evidente y por más que ponga cara sexy la realidad es que la espasticidad me representa.

Y.. no tengo muy claro cómo, terminamos en un beso. Varios besos.

Mi amiga se iba y me tocó irme con ella porque todo el resto ya había abandonado. Me despedí y él me pidió el teléfono.

Aja.

Bueeeeeeeeeeeeena manera de terminar el sábado. Le ganamos la batalla al aburrimiento.

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Hoy lunes:

17.30hs. Mensajito de texto:.

" Te puedo ver hoy?"

Número desconocido.

Se me paró el corazón. ¿El viajero viajante? Plis que sea.

Plis, plis, plis.

Lo llamé a ese numero. No me atendió.

Le mande un mensaje: "Me desocupo a las diez, llamame así se quien sos".

NO CONTESTÓ.

Y ¿si no era?

Mucho peor...¿Y si se arrepintió?

Me quiero morir muerta.